BLOQUE 3. CALIGRAFÍA. PRÁCTICA.

Como parte práctica voy a comenzar con los alumnos de 2º de primaria que necesitan refuerzo en la caligrafía al tener letra casi ilegible, que se les complica el trazo y que se encuentran por detrás del ritmo y la evolución de la clase. Implicaré a sus padres para que me digan cómo le ven trabajar y si creen que cumple los pasos a seguir que le pido y se verán a continuación.

Para que mejoren la letra y corrijan los errores que tienen les explicaré lo que vamos a trabajar de manera motivadora para que consigan mejorar su letra y sentirse orgullosos de su esfuerzo. Esto será de manera individual y teniendo en cuenta la manera de hacerles ver que van a sacarlo adelante, de la circunstancia particular de cada niño e individualizada.

Por ello el tipo de explicación y de motivación que daré a cada niño será la siguiente:

Le explicaré que voy a ayudarle a mejorar la letra y que para ello necesito que se esfuerce. Le contaré de manera natural que le voy a entregar unos ejercicios muy divertidos, entretenidos y que no requieren mucho tiempo para que trabaje en su casa. Como se tiene que esforzar le remarcaré que no lo haga con prisas porque de esta manera no logrará hacer las cosas bien y aprender de verdad y que como confío en él (tú puedes, confío en ti, sé que lo vas a hacer requetebién, verás lo que vas a aprender), en que es totalmente capaz de hacerlo y de sorprenderme con sus tareas (ya verás cómo me dejas con la boca abierta…).

Lo primero de todo debe enseñar en casa el material que le he preparado para que sus padres estén enterados y familiarizados con el refuerzo. A continuación le indicaré que en el momento en el que se vaya a poner a trabajar tiene que organizar el material que vaya a usar en la mesa (lápiz, goma, sacapuntas…) para no distraerse en sacar cada dos por tres lo que necesita del estuche o levantarse ya que esto le va a despistar y que sé que puede organizar todo para dar lo mejor de él. En cuanto tenga todo el material colocado y la lámpara dando luz directa a las hojas tiene que acordarse de sentarse recto por consiguiente le diré que me enseñe cómo se hace y le alabaré haberlo hecho bien (qué campeón, mira qué bien te colocas para trabajar, así da gusto…) y diré que así es como tiene que sentarse también en casa. Además le pediré que me enseñe como se dispone a escribir, cómo coloca las manos y cómo coge el lápiz y le recordaré de manera práctica cómo tiene que apoyar la muñeca en el folio y cómo tiene que sujetar el lápiz entre el pulgar y el índice apoyando el dedo del medio. Le dejaré claro que no es nada fácil disponerse a trabajar, colocar bien las manos y sujetar el lápiz por lo que necesita practicarlo todos los días para que llegue a ser inconsciente y no sólo lo conseguirá hacer a mayor velocidad sino que encima lo hará bien y sin prisas. Le entregaré fotos o imágenes de estas posturas (de sentarse, colocar los brazos y manos y sujetar el lápiz) para que al principio recurra a ellas en caso de duda y que me avise cuando lo hace solito sin tener que mirarlas.                                     

Las fichas intentaré relacionarlas con sus gustos (el cine, el parque, el teatro, dibujos, superhéroes, lugares…) o deportes (el futbol, el basket, skateboard, los coches…) preferidos para que se sienta identificado con el trabajo y de lo mejor de él, para conseguir tenerle motivado. En las fichas vendrán por escrito frases de su interés y algún dibujo para que coloree (un superhéroe, un cochazo…) después de trabajar la caligrafía. En un principio le mandaré 2 fichas por semana, luego 3 por semana y después una 4 durante la semana y una para trabajar el find. Esto acompañado de hacer puzles y del primer día de la semana entregarme trabajo recortado para trabajar la psicomotricidad fina. Para ello también le recordaré cómo coger las tijeras y pediré ayuda en su casa en que sigan su evolución.

Le reforzaré de tal manera que cada vez que me traiga los ejercicios de refuerzo realizados y bien le pondré una estrella sonriente en la agenda y una frase diferente cada día para motivarle y para que orgulloso les enseñe a sus padres lo contenta que está la profesora, por lo que tendrá ganas de conseguir más estrellas sonrientes y podrá elegir el color. Esto estará acompañado de palabras cariñosas y motivadoras para el alumno (eres un crack, mira que trabajas bien, ¿has visto lo bien que trabajas en casa?...) y le haré ver de esta manera que hacer deberes en casa no es un horror sino una suerte ya que así puede conseguir lo que se proponga para que además adquiera un hábito natural de trabajo. Como último punto o ayuda en su motivación, al conseguir y mejorar la caligrafía le regalaré un lápiz y una goma mágicos que le darán fuerzas para trabajar tan bien como hasta ese momento. De este modo podré evaluar cómo trabaja, su motivación, su esfuerzo y si necesita algún cambio.

  

En cada curso se trabajará de una manera más enfocada a los alumnos de ese curso y edades y se les motivará y acompañará de manera parecida pero con variaciones.

En el caso de los alumnos de 4º de primaria que tienen mala letra, errores en el trazo y su evolución va más a marchas forzadas y con retraso lo trabajaré de manera individualizada como con los alumnos de 2º de primaria. Será de la siguiente manera:

Le recordaré que ya está en 4º de primaria y le pediré por ello que como niño ya mayorcito tiene que tener buena letra, letra de un niño de su edad. No sólo evaluaré esta vez que mejore la caligrafía sino también que trabaje limpio y ordenadamente. La manera de explicarle es más directa y con menos detalle pero la motivación sigue ahí y será adecuada para su edad. Sin que se sienta pequeño al decirle lo mucho que va a aprender, lo que va a conseguir o lo bien que está trabajando y esforzándose. Será de una manera cercana pero sin que se sienta observado y evaluado a todas horas ya que necesita más espacio. Le recordaré la postura que tiene que tener en la silla, su disposición y demás aspectos que también se trabajan en clase. Le recordaré que el momento de trabajar en casa no puede estar haciendo o pensando en otra cosa porque tiene que conseguir un hábito de estudio. Cuando se lo diga en clase tendré en cuenta que puede ser observado por alumnos y si me pongo muy encima se puede sentir incómodo. Desde mi punto de vista puede ser un niño por la edad y por tener una dificultad (la caligrafia...) puede que no le guste llamar la atención y que sus compañeros vean que necesita ayuda por lo que lo trataré con naturalidad sin hacerle sentir presionado o incómodo.

Le regalaré antes de empezar a trabajar un bolígrafo que piense que le puede gustar conociendo sus gustos por lo que una opción es recurrir a su equipo favorito. Así empezará con una disposición más positiva.

En este caso empezaré mandándole 3 fichas a la semana, luego 4 y una ficha el fin de semana y después 4 durante la semana y 2 para el fin de semana. Le explicaré que cada ficha podrá hacerla en unos 10 minutos y que no hay prisa sino ganas de aprender y hacerla bien. También tendré en cuenta sus intereses para que las fichas las vea con otros ojos pero serán intercaladas con fichas que sepa pueden tener buen resultado aunque no sean de su interés y que así consiga los objetivos propuestos. Le pediré una pequeña redacción sobre intereses suyos una vez al mes más o menos. Le daré una plantilla para que tenga un espacio concreto donde escribir y sepa lo que tiene que ocuparle. Le premiaré con notas en la agenda positivas para que lo vean los padres y asimismo en el caso de que sepa que le gustan las pegatinas le pondré pegatinas de su equipo favorito.

Iré teniendo en cuenta su evolución y modificando trabajos según vaya viendo.

   

Por último quiero tener en cuenta el caso de alumnos de 6º de primaria (casi entrados en la E.S.O.) que tienen mala letra, problemas con el trazado y se nota que necesitan apoyo. A estas “alturas” sería un logro conseguir que alumnos que se encuentran en esta situación consigan lo que pretendemos, que escriban bien y tengan un trazo excelente. Por ello hay que enfrentarlo con valor y positivismo y no tirar la toalla. Por ello hablaré con el alumno en cuestión de manera individualizada y porque yo lo veo necesario en un rato del patio para que no se sienta incómodo delante de sus compañeros porque están en una edad complicada.

Le comentaré al alumno que es momento de ponerse las pilas y conseguir que se entienda su letra. Necesita que tanto yo como sus compañeros puedan leer una redacción suya y no sólo enterarse de lo que está escrito sino que sea un gusto leerlo debido a que está limpio y claro.

En el caso del alumno de este curso si le mando mucha tarea creo que puedo desmotivarle sin embargo, si le mando menos tarea pero concisa lograré que le ponga ganas, se esfuerce y quiera conseguir escribir bien. Le explicaré con cariño pero estricta al mismo tiempo que nunca es tarde para conseguir lo que se quiere, que necesita estar dispuesto y querer escribir bien y claro y que tiene un potencial alucinante que hay que sacar hacia afuera (ha llegado el momento de enseñar lo que eres capaz de hacer y conseguir con actitud y esfuerzo).

Le recordaré como todos los días indico en clase que es importantísima la postura para no entrar en cansancio en seguida, no tener dolores de espalda y cuello y para trabajar mejor y en casa debe colocarse como se le ha enseñado.

La ficha tardará en realizarla el doble que alumnos de 4º. Conlleva más tiempo pero es menos cantidad con lo cual se puede equiparar. Le motivaré cada vez que lo vea necesario ayudándole a seguir adelante y a querer conseguir algo que podía haber pensado no lograr en la vida. Todo esfuerzo tiene su recompensa. Le dejaré claro que puede contar conmigo para lo que necesite, vea dificultad o no. Que me comente si le gusta lo que le mando para poder evaluar mi trabajo y ver si es necesario cambiar de método o ficha. Una vez al mes más o menos le pediré que me escriba una redacción de lo que ha hecho un fin de semana cercano o un día cercano. Le daré una plantilla para que tenga un espacio concreto donde escribir y sepa lo que tiene que ocuparle. Le transmitiré mi confianza y espero que se sienta confiado en incluso enseñar a sus compañeros lo que está mejorando.

No le pondré notas en la agenda pero le recompensaré con positivos en la asignatura de lengua de trabajo en casa para subir su nota.

Trabajaremos que los alumnos conozcan todo tipo de letras para que ellos escriban finalmente como más cómodo, fácil y mejor les resulte.